Septiembre es por excelencia el mes de los niños y los jóvenes, el comienzo del curso escolar. Para muchas familias representa un comienzo del año, cargado de nuevos propósitos y de nuevos planes. La cuesta de septiembre implica afrontar los gastos de la vuelta al cole. Se estima que, entre libros de texto, material escolar y ropa, el desembolso está en torno a 500€ por niño. En el caso de los jóvenes que estudian universidad el gasto medio se eleva a 2.750€.
Extremadura encara este nuevo curso escolar con los objetivos fundamentales de garantizar una alta calidad en la enseñanza minimizando los recortes en los presupuestos destinados a Educación y sobre todo, tratando de poner freno al alto índice de fracaso escolar. Para esto último es imprescindible que las familias se impliquen al máximo en motivar a sus hijos en sus estudios y en participar activamente en la educación junto con el profesorado. Desde aquí enviamos nuestro deseo que sea un año escolar fructífero y cargado de buenas experiencias para los estudiantes.
Y sigamos hablando de niños pero cambiando radicalmente de asunto: ¿Hay niños que pasan hambre en Extremadura? Esta es una pregunta directa que requiere una respuesta directa: Sí, los hay, hay niños que pasan hambre en Extremadura. ¿Hay niños que tienen forzosamente una dieta desequilibrada? Sí, los hay, hay niños y niñas que como consecuencia de la carencia de recursos económicos de sus familias y de situaciones de pobreza material severa tienen una dieta desequilibrada, donde el consumo de frutas y verduras frescas y de proteínas a través de la carne o del pescado brilla por su ausencia en sus comidas diarias. Y son varios miles de niños y niñas los que atraviesan por esta situación.
Durante las vacaciones de verano, concretamente entre el 15 de julio y el 6 de septiembre, una media de 407 niños entre 3 y 12 años han acudido diariamente a los diez comedores escolares habilitados en Almendralejo, Badajoz, Cáceres, Don Benito, Mérida, Plasencia y Villanueva de la Serena. El Gobierno de Extremadura, Cruz Roja, y Cáritas, han sido las encargadas de su gestión.
Ha sido un Programa Extraordinario de Atención a Menores en los que se han servido un total de 15.894 menús. Estos menús han incluido tres comidas, desayuno, almuerzo y cena, garantizando de este modo su correcta alimentación mediante una dieta sana y equilibrada. Estos son los datos que se han dado a conocer la semana pasada una vez finalizado este programa al que se han destinado 263.400 euros y que además ha permitido la contratación de treinta y cinco personas durante este verano.
Este Programa de Atención a Menores ha sido de carácter extraordinario y excepcional, que se puso en marcha en un tiempo récord, ha cumplido su misión y se ha desarrollado sin ningún tipo de incidencia. El Gobierno extremeño ha reconocido el trabajo desarrollado por Cruz Roja y Cáritas, que han demostrado que desempeñan una encomiable labor social, así como por su implicación para complementar los servicios de comedor con actividades lúdicas y educativas para los menores, en las que han participado ochenta y nueve voluntarios de estas dos organizaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su participación en este Blog