Pobreza en Extremadura

¿Hay pobreza en Extremadura? La respuesta es contundente, Sí la hay. Sin matices. La pobreza, como concepto, significa carencias de algo relacionado con las necesidades vitales y básicas. Estas carencias pueden tener un carácter transitorio o permanente en el tiempo. Y esas carencias impiden vivir con dignidad y de manera estable y adecuada en el presente y condicionan su futuro. Y la pobreza afecta a casi la mitad de la población de Extremadura. Además, la pobreza y la exclusión se debe a muchos factores y causas, por eso se dice que la pobreza es multicausal o multifactorial. Por tanto, es erróneo que solo miremos la pobreza en términos monetarios.

¿Cómo se mide la pobreza? Podemos medir la pobreza de dos maneras, y ambas son muy útiles para saber cómo responder contra ella. La primera se utiliza en territorios y poblaciones pequeñas y consiste en recabar los datos directamente de las personas y familias que tienen carencias materiales. 

La segunda forma de medirla es a través de datos estadísticos obtenidos de diferentes fuentes. En todos los Estados de la Unión Europea el indicador que mide la pobreza de la misma manera es el AROPE, que traducido al español significa “indicador de personas que están en riesgo de pobreza y exclusión social”. 

El indicador AROPE combina tres factores, que son, los ingresos en el hogar, el factor de privación material severa y por último el indicador de baja intensidad del trabajo. Y estos son los datos que afectan a Extremadura. 

En función de la renta que se ingresa por hogar, 342.372 personas disponen de unos ingresos que están por debajo de 411€ al mes por lo que se dice que su situación es de pobreza relativa. ¿Esto quiere decir que son pobres? No exactamente. La pobreza relativa es un indicador que mide la desigualdad, y por tanto no mide la pobreza absoluta, sino cuántas personas tienen ingresos bajos en relación al conjunto de la población. 

El segundo factor que mide el AROPE es el de la privación material severa. Este indicador en Extremadura se ha duplicado entre 2007 y 2013, afectando a unas 15.512 personas, que padecen privación de aspectos básicos como comida, luz, gas, agua, ropa, medicinas…; y que carecen también de redes de apoyo que les ayuden. En este indicador, Extremadura es una de las regiones españolas con una tasa de pobreza severa más bajas. Y esto es así porque el coste de vida en Extremadura es más barato que hacerlo en otra Región. Además, la economía de sobreviviencia permite formas de conseguir alimentos, pagar la vivienda, etc; y porque actúan con fuerza las redes de apoyo, donde las personas se conocen y generan sistemas de ayuda mutuos. 

El tercer factor es el relacionado con la baja intensidad de trabajo en el hogar, y del que se desprende que en Extremadura más de 77mil personas pertenecen a hogares con baja intensidad de empleo, es decir, donde ni siquiera uno de sus miembros en edad de trabajar tiene un empleo que dure todo el año.

¿Se está solucionando la pobreza? No, no se está solucionando, al contrario, se está empeorando. ¿Por qué? Porque se están perdiendo derechos, se está perdiendo protección social y se está perdiendo poder adquisitivo.