La empresa "Montesano" radicada en Jerez de los Caballeros lleva un año exportando jamones a China, algo que está autorizado desde junio 2007, cuando el primer ministro Wen Jiabao, le comunicó al rey Juan Carlos I, que su Gobierno aprobó la importación de los productos porcinos españoles. Pero en particular, por el hecho de ser canario-extremeña, esta es una buena noticia. ¿Dónde está la noticia? Atención al dato:
Para que hayan podido enviar casi 1500 piezas han tenido que superar importantes trabas burocráticas y sanitarias, además de las culturales: De momento solo se ofrece en hoteles y restaurantes, deshuesado y bajo un estricto control sanitario, de envasado y etiquetado, así como el nombre del importador chino como garantía de la trazabilidad del producto. Cómo serán estos chinos que solo 10 de 300 empresas españolas consiguieron superar los controles impuestos para acceder a ese mercado, y de las diez agraciadas solo dos empresas exportan jamones.
Es cierto que, en comparación con otro tipo de productos y articulos, la importación-exportación de alimentos directos al consumo humano tiene un procedimiento diferente en todos los países del mundo, y también sé que de forma particular los productos del cerdo ibérico español han tenido que superar especiales trabas (principalmente por la fiebre porcina) para acceder a otros mercados (USA por ejemplo).
Lo que me sorprende es el modus operandi de los chinos para con la importación de productos, que en cuestión de rigor no se parece en nada al control que siguen con sus propios productos nacionales, ni en la producción ni distribución ni comercialización de alimentos en el territorio chino; ni por supuesto nada que ver con el rigor con el que controlan los productos que exportan sean de la naturaleza que sean. No tengo que ir a la China a comprobarlo. Son tan infinitiamente innumerables los reportajes, las noticias, los documentales, las películas... Por un momento, me gustaría imaginarme el mercado español estableciendo los mismos controles para cualquier y para todos los productos importados desde China. ¿Cuántos no podrían pasar?
La noticia se sigue en Canal Extremadura Noticias (minuto 14:25) e informa que el jamón se vende a 130 euros el kilo. China también produce jamón serrano. Los productores extremeños no lo consideran una amenaza, sino una oportunidad para la producción de aquí.
Para que hayan podido enviar casi 1500 piezas han tenido que superar importantes trabas burocráticas y sanitarias, además de las culturales: De momento solo se ofrece en hoteles y restaurantes, deshuesado y bajo un estricto control sanitario, de envasado y etiquetado, así como el nombre del importador chino como garantía de la trazabilidad del producto. Cómo serán estos chinos que solo 10 de 300 empresas españolas consiguieron superar los controles impuestos para acceder a ese mercado, y de las diez agraciadas solo dos empresas exportan jamones.
Lo que me sorprende es el modus operandi de los chinos para con la importación de productos, que en cuestión de rigor no se parece en nada al control que siguen con sus propios productos nacionales, ni en la producción ni distribución ni comercialización de alimentos en el territorio chino; ni por supuesto nada que ver con el rigor con el que controlan los productos que exportan sean de la naturaleza que sean. No tengo que ir a la China a comprobarlo. Son tan infinitiamente innumerables los reportajes, las noticias, los documentales, las películas... Por un momento, me gustaría imaginarme el mercado español estableciendo los mismos controles para cualquier y para todos los productos importados desde China. ¿Cuántos no podrían pasar?
La noticia se sigue en Canal Extremadura Noticias (minuto 14:25) e informa que el jamón se vende a 130 euros el kilo. China también produce jamón serrano. Los productores extremeños no lo consideran una amenaza, sino una oportunidad para la producción de aquí.
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